Tener la piel atópica puede afectar a la calidad de vida, todo depende del grado de severidad de la dermatitis atópica que se padezca..
Este malestar que produce la piel atópica no tan solo afecta a la persona que la sufre directamente, también puede afectar a sus seres más cercanos, como familiares, amistades o parejas.
Las personas que sufren de una piel atópica más severa y, en el caso de sufrirla desde su nacimiento o desde muy pequeños, suelen vivir condicionadas por esta enfermedad.
Deben controlar su alimentación, comprobar de qué tejidos están hechas las prendas de ropa que quieran comprar (a veces no pueden comprar la ropa que quieren porque los tejidos les provocan reacciones adversas), deben convivir con picores constantes en sus pieles, tanto de día como de noche, a veces hasta dificultando el sueño e interrumpiendo sus relojes internos.
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Es cierto que tener dermatitis atópica afecta a nivel físico, pero también hay un fuerte impacto psicológico para las personas que sufren esta enfermedad, sobre todo en la adolescencia.
Las personas que conviven con dermatitis atópica no pueden evitar rascarse para aliviar el picor que sienten constantemente, lo que provoca que ellos mismos se hagan heridas inconscientemente.
Hay periodos singulares como la adolescencia. No es ningún secreto que algunos adolescentes pueden ser incomprensivos y llegar a la crueldad con compañer@s que tengan alguna diferencia notoria, como las lesiones y rojeces cutáneas que provoca la dermatitis atópica u otras dolencias dérmicas.
¿Cómo afecta la dermatitis a los seres cercanos de una persona con piel atópica?
La dermatitis no solo afecta a la persona que la padece, sino que también afecta a las personas de su entorno.
Los tratamientos y hábitos que deben aprender las personas que padecen de piel atópica no tan solo son incómodos para ellos, también lo son para las personas más cercanas, que han de adaptarse a las peculiares necesidades y hábitos de las personas que padecen dermatitis atópica.
Los familiares, amistades y parejas de las personas afectadas por dermatitis atópica, las acompañan tanto física como emocionalmente en su recorrido para controlar la dermatitis y en los tratamientos que deben realizar en caso de necesitar tratamiento médico.
*No se ha encontrado ninguna “cura” para la dermatitis atópica, la piel atópica es una enfermedad crónica que se mantiene bajo control con constancia, tratamiento médico en caso de ser necesario y siguiendo un estilo de vida específico. Antes de tomar cualquier medicación o aplicar corticoides, pide una cita con tu dermatólogo.*