La sequedad vaginal puede aparecer en cualquier momento. Cuidar e hidratar la zona íntima es muy importante para prevenir molestias, afecciones y sequedad. Revisamos algunas de las causas de la sequedad vaginal externa y cómo prevenirla.
Sequedad vaginal externa: causas y cómo prevenirla
-
Menopausia, disminución de estrógenos y envejecimiento de los tejidos del cuerpo.
Con la edad, la piel y los tejidos del organismo se deterioran y envejecen. Con ello, también se reducen las hormonas estrógenos, encargadas de mantener la zona íntima lubricada, causando calores, sequedad dérmica (que afecta sobre todo a la zona íntima externa) y muchos otros síntomas característicos durante la menopausia.
-
Procesos emocionales y episodios de estrés.
Factores emocionales, el estrés y los cambios emocionales afectan a la piel y también a la salud íntima. Debilitan la piel, el pH se altera con mayor facilidad y la piel se reseca.
-
Infecciones, cosméticos íntimos, ropa ajustada o tampones perfumados.
Pueden alterar el pH y la regulación de la humedad de la zona íntima, contribuyendo a la sequedad vaginal externa (e incluso interna) y produciendo grietas.
-
Malos hábitos, dieta desequilibrada o el tabaquismo.
La falta de nutrientes, actividad física e, incluso, malos hábitos como el tabaquismo, alteran el flujo sanguíneo, la humedad de la zona y contribuyen a la deshidratación dérmica.
-
Higiene íntima deficiente.
Tanto la falta como el exceso de limpieza pueden afectar al equilibrio del pH y producir sequedad vaginal externa.
¿Cómo prevenir la sequedad vaginal externa?
Mantener una correcta higiene íntima ayuda a prevenir. Recomendamos el Tratamiento sequedad vaginal. Con aplicar el tratamiento para la sequedad vaginal una vez al día, preferiblemente por la noche, consigue mantener la hidratación dérmica de la zona externa y prevenir sequedad vaginal extrema.
El Aceite jabonoso, limpia e hidrata la zona sin alterar el pH.
|
La sequedad vaginal puede aparecer en cualquier momento. Es una zona especialmente delicada y mantenerla en buen estado y unos buenos hábitos de vida es fundamental, sobre todo, para el bienestar.