Cómo Evitar Riesgos con la Comida en Días de Calor

Cómo Evitar Riesgos con la Comida en Días de Calor

El verano es sinónimo de sol, relax y comidas al aire libre. Sin embargo, las altas temperaturas también tienen un riesgo silencioso: la contaminación de los alimentos.

En GGcare, creemos que sentirse bien empieza con lo que comes… ¡y con cómo lo cuidas! Por eso, hoy te compartimos los principales consejos para disfrutar de una alimentación saludable y segura durante los días más calurosos del año.

¿Por qué es tan importante tener cuidado con la comida en verano?

El calor acelera la descomposición de los alimentos, especialmente aquellos ricos en agua y proteínas como pescados, lácteos, carnes y huevos. Si no se conservan adecuadamente, pueden ser un caldo de cultivo para bacterias como la Salmonella o la Listeria, responsables de intoxicaciones alimentarias.

Los síntomas más comunes son: malestar estomacal, vómitos, fiebre, diarrea… ¡que pueden arruinar cualquier día de verano!

Consejos clave para evitar riesgos con la comida en verano

1. Mantén la cadena de frío

  • Usa bolsas térmicas o neveras portátiles si vas de picnic o a la playa.
  • Guarda inmediatamente en la nevera los alimentos perecederos al volver a casa.
  • No dejes productos lácteos, carnes o salsas fuera del refrigerador más de 1 hora si hace mucho calor.

2. Lava bien frutas y verduras

  • Aunque no las vayas a consumir con piel, es fundamental lavar todo bajo el grifo para eliminar bacterias y residuos.
  • Si es posible, desinféctalas con unas gotas de vinagre o productos aptos para ello.

3. Evita comidas crudas de origen animal fuera de casa

  • Tartares, mayonesas caseras, mariscos o huevos crudos deben consumirse con mucha precaución.
  • Si no estás segura de cómo fueron preparados o conservados... mejor opta por otra cosa.

4. Cocina bien los alimentos

  • Asegúrate de que carnes, pescados y huevos estén bien cocidos. Las altas temperaturas al cocinar eliminan bacterias que podrían estar presentes.ç

5. Higiene siempre

  • Lávate las manos antes de cocinar o comer, especialmente si estás al aire libre.
  • Evita mezclar alimentos crudos y cocidos en los mismos recipientes o utensilios.

Elige opciones frescas, ligeras y seguras

Durante el verano, opta por comidas fáciles de digerir y que se conserven bien, como:

  • Ensaladas con legumbres cocidas, cereales fríos o vegetales frescos.
  • Frutas de temporada bien lavadas y refrigeradas.
  • Pescados a la plancha y verduras al vapor.
  • Yogures naturales o smoothies caseros con hielo y fruta congelada.

💡 Consejo extra: prepara tus comidas del día por la mañana temprano o por la noche, y guárdalas en porciones herméticas. Así evitas manipular alimentos cuando el calor está en su punto más alto.

Recuerda hidratarte

Además de cuidar qué comes, también es importante beber suficiente agua. Si te cuesta, puedes sumar infusiones frías, agua con rodajas de frutas o agua de coco natural. Evita bebidas azucaradas o alcohólicas en exceso, que favorecen la deshidratación.

Cuidar lo que comes en verano no solo es una cuestión de nutrición, sino de prevención y bienestar integral. Con pequeños hábitos puedes evitar grandes molestias y disfrutar esta temporada sintiéndote bien por dentro y por fuera.

En GGcare te acompañamos con productos naturales y consejos pensados para cada etapa del año. Porque cuando eliges cuidarte, se nota en cada detalle.

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